Las ganas que teníamos de esta boda no se pueden expresar con palabras. Iria y Borja han superado todas las expectativas y han dado una lección al mundo de cómo con paciencia, ilusión y ganas todo se puede conseguir. Llegó el día tras reponerse del primer aplazamiento por la pandemia. Se propusieron resarcirse, disfrutar, bailar, …